Franek Kępa tiene solo 10 meses y a su corta edad tiene que enfrentarse a una enfermedad genética grave: Atrofia muscular espinal (AME) tipo 1. Para pararla su única esperanza está en la TERAPIA ZOLGENSMA, la terapia genética más cara del mundo; cuesta aprox. 2 000 000 de euros y, por esa razón, los padres del niño solos no son capaces de pagarla.
Además, hay que recaudar el dinero tan pronto como sea posible porque el tratamiento se puede hacer solo hasta el segundo año de vida. Por si eso fuera poco, cuanto antes se haga, el pequeño responderá mejor. En Polonia la familia creó un gran movimiento para poder comprar el fármaco para Franek; por desgracia, desde que empezó la pandemia del coronavirus, la recaudación se ha ralentizado mucho.
Por lo tanto, nuestra ayuda es imprescindible para que Franek pueda someterse al tratamiento. El tiempo está pasando muy deprisa y la enfermedad del niño progresa. https://www.kukumiku.com/proyectos/una-vida-mejor-para-franek/